viernes, 5 de diciembre de 2008

Inventar es humano..




Todos llevamos dentro un inventor, un poeta, un aventurero…, pero sólo aflorará si tenemos la suficiente imaginación, inspiración y valentía.



En los comienzos del mundo, todo era oscuridad. Los planetas danzaban en un manto de mágico silencio marcando el curso del tiempo. Pero un viejo hechicero sabía que la luz existía más allá de la selva y que estaba en poder de un solo hombre. Mandó a su hija a buscarla. La joven tuvo que enfrentarse a muchos peligros. Llegó a la aldea donde vivía un apuesto y simpático joven que no tuvo inconveniente en entregar a tan bella muchacha una pequeña caja donde guardaba tan preciado misterio.La hija regresó junto a su padre. El hechicero exhibió durante mucho tiempo, a miles de curiosos, su gran tesoro, pero, cansado de abrir y cerrar la caja, un día lanzó la luz por los aires hasta que se quedó en el cielo.

Pero la luz era caprichosa y se movía de un sitio a otro sin estarse quieta. El hechicero se reunió con otros colegas hasta que encontraron una solución: pintaron el caparazón de una tortuga gigante de muchos colores y la pusieron en mitad del campo. Y entonces… Oh, se hizo el milagro: parecía como si la luz se hubiera enamorado de aquella superficie multicolor y se hubiera concentrado en ella, porque dejó de moverse para siempre, y se transformó en el sol.



¿No crees que tenemos que reinventar nuestras vidas continuamente para que los rayos de luz entren en ella.?








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Los amigos son como las estrellas, no siempre los vemos pero sabemos que siempre estan ahi .